Cuca Esteves

La noche en que se rompió el acuario

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©Cuca Esteves

Para entender en profundidad los recitales de Cuca Esteves tenemos que conocer las raíces de las que se alimenta. Cuca ha construido su territorio expresivo en la frontera donde vienen a coincidir la narración, la poesía, la música y las artes escénicas. Este territorio es el resultado de una concepción que se ha gestado a lo largo de su vida, desde sus estudios de piano en el Conservatorio de Buenos Aires, de composición en París y en La Haya, hasta su formación en escritura para las artes escénicas en Riverside, California. Las artes escénicas son quizás la clave que disuelve y resuelve su dilema entre música y literatura.

Josep Giralt

La noche en que se rompió el acuario de 400 litros de Patrick

En el medio de la noche

las cuatro de la mañana

nos despertamos escuchando un

ploc

            ploc

                        ploc

¿Qué es eso?

¿Escuchás?

Sí, suena a agua.

Gotas.

Prendemos la luz

y guiados por el sonido

llegamos al pie de la cama

donde vemos

un chorro bajando

            no un hilo de agua

            un chorro

por la pared.

La pared donde están los estantes con el equipo de audio de Marcel.

No lentamente,

sino a raudales

y encima de la cama

            gotas.

Tocamos el equipo

está mojado.

Espantados

movemos todo lo que está contra la pared y enseguida

salimos a gritar al medio del patio

hacia el balcón

¡Patrick!

            ¡Patrick!

a todo pulmón.

Pero no pasa nada.

Entonces subimos las escaleras del frente y golpeamos a la puerta           

¡Patrick! Wake-up!

Water!

Hasta que al fin nos escucharon y abrieron.

Marcel entró

y vociferando les explicaba

¡El acuario!

¡Está perdiendo agua!

Y las luces se prendieron una a una

la gente deambulando apareció por los pasillos medio dormidos

(siempre había algún extra que se quedaba a dormir)

¿Qué?

           ¿Qué?

                        ¿Qué pasa?

Hasta que todos se levantaron

y procedieron a vaciar la pecera con cubos

(¿qué habrá pasado con los peces?)

y nosotros

a desparramar toallas por la cama

           por los estantes

            en el suelo

            contra la pared

y después de una hora más o menos

volvimos a la cama

pero no en la pieza, no,

tiramos el colchón en la sala

y nos armamos una cama provisoria.

A la mañana siguiente

           al levantarme

miré a los nuevos manchones de agua

            y me resigné

                       a no poder hacer nada al respecto.

Pero cuando pasados los días

Patrick

ni siquiera pasó a pedir disculpas

preocupada por el moho y la humedad

compré un secador de pelo         

    (¡un secador de pelo!)

para secar las manchas

y subí al piso de arriba

            toc toc toc

¿Está Patrick?

Era Brad,

Sí, que me apuntó hacia adentro

hacia el cuarto que está arriba de nuestra sala

y ahí estaba el Maestro

            El King

            de nuestro pequeño drug cartel

en ese cuarto con una cama y demasiadas cosas.

Le di el recibo del secador de pelo y le dije,

            Tomá. Me debés esto. Por el desastre de la pecera.

Lo miró y me dijo,

            Sí, no, disculpa, disculpa,

Y me dio una bolsa de maría

            y un billete de cincuenta euros.

Bajé a casa con sus regalos

y mi recibo por un secador de veinte

para pasarme unas cuantas horas parada en el escalón más alto de la escalerita plegable

secando el techo

con el brazo levantado y la cabeza hacia atrás

en una posición bastante incómoda.

Después de meses…

            o más,

            de odiarlo profundamente,

                        se secó.

_________

CUCA ESTEVES (Argentina, 1970) es compositora, música, y escritora. Después de su formación en el Conservatorio de Buenos Aires, estudió composición en París y La Haya, y escritura creativa en la Universidad de California. Actualmente, vive en Scheveningen (La Haya). Ha publicado un libro de poemas, Crónicas Schevingeanas (Valparaíso Ediciones, 2020).

Publicado el 19/06/2022